“Esta fue la culpa de su hermana Sodoma: ella y sus hijas tenían orgullo, exceso de comida y próspera tranquilidad, pero no ayudaron al pobre y al necesitado”. (Ez 16, 48-49)

sábado, 28 de marzo de 2015

Caminando a su lado.

La Pascua se acerca.
Nuestra travesía nos conduce pronto a subir también nosotros con Jesús a Jerusalén.
¿Sería nuestro deseo como el de los griegos de este domingo de cuaresma por ver a Jesús?
¿Para ser un espectador de estas próximas horas  en que Cristo pasará por la cruz para ser glorificado
O estamos dispuestos a seguirle hasta el fin para servirlo?
Entonces,
Ya es hora de descentrarnos para poner nuestros pasos en los de Cristo.
Ya es hora de que nuestros ojos se abran para reconocer en nuestros hermanos el rostro de Cristo.
Ya es hora de desprendernos de nuestro egoísmo, de renunciar a nuestras malas costumbres.
Ya es hora de aceptar morir un poco a uno mismo, de quitar lo que estorba a nuestro corazón para tener la vida en abundancia como el grano de trigo debe ser enterrado en la tierra para dar fruto.
Ya es hora de confiar en Dios cuando la angustia nos golpea.
Ya es hora de acoger la ternura de Dios, él que nos ofrece una alianza nueva, una alianza de perdón.
Ha llegado el tiempo de caminar tras tus pasos Señor, de imitarte y de servirte en los pobres y en todos hombres que nos rodean. Elévanos de la tierra contigo, atráenos a ti para que entremos como tú en el amor incondicional del Padre al servicio de los demás.
*
Anne-Marie,Hermana de la Communion Béthanie
***

No hay comentarios:

Publicar un comentario